Reseña-Batman Beyond, el Camino del Héroe de Ningún Lugar.

Termina Batman Beyond en su periplo perteneciente a New 52. De esta forma concluyen todas las publicaciones bajo esta etiqueta y abriendo paso a plenitud a Rebirth como continuación lógica dentro de los sucesos que se han venido dando desde aquel ya lejano Flashpoint que nos trajo cosas buenas o malas según la visión de cada quien en algunos casos o la inevitable objetividad en otros, pero eso ya será material para una reseña diferente si a ustedes bien les parece. Ahora a hablar de esta serie y de su final. Comenzamos.

Cuando en 2014 se habló la introducción de Batman Beyond dentro de la continuidad oficial del Universo DC muchas expectativas se levantaron y no era para menos; el personaje tenía una significativa legión de seguidores desde la recordada serie animada que heredaba todo lo bueno de las producciones en esta categoría que bien desarrolló Warner en la década de los 90’s. Terry McGinnis tenía carisma, era un joven con el cual cualquiera se identificaría y que con el tiempo crecería como personaje y más aún como heredero del manto de Batman sin ser en ningún momento una copia en las formas de nuestro sempiterno Bruce Wayne, lo cual nos daría nuevas perspectivas para apreciar el legado del murciélago en una Gotham distópica de algunos años en el futuro.

La llegada del personaje se dio de la mano de Futures End, serie de carácter semanal que a pesar de los fallos que pudo haber tenido y sobre todo se lo atribuyo a tener que contar en números únicos historias de varios personajes que por cuestiones de formato debían ser mutiladas y contarse en pequeñas porciones, lo cual se hacía lento al lector que esperaba más contenido y quedaba con muchas interrogantes en cada nueva entrega. Para lo que tenemos otro modo de leer, y nos gusta atar cabos sueltos, esta serie se convirtió en caldo de cultivo para teorías de todo tipo de lo que había cambiado, de los eventos que lo habían provocado, de que podría ser o sobre todo de la conclusión y eso en el fondo a mí siempre me ha parecido interesante.

Tras una serie de eventos, Terry, quien venía de un futuro post apocalíptico 35 años en el futuro (muy deudor del imaginario característico de la saga Terminator), llega al pasado de esa línea de tiempo que resultaba ser 5 años en el futuro a partir del presente, en lugar de 2 años antes del presente, es decir, que llegó 7 años más tarde de lo previsto para evitar la creación de Brother Eye, causante del infierno tecnológico que se vive en su tiempo originario, sin embargo, veía todavía factible la destrucción del programa Brother Eye y de este modo evitar la hecatombe que se vivirá muchos años en el futuro y que habría diezmado a la humanidad al punto de ser una resistencia mínima. 

En todo este embrollo y teniendo de fondo con un componente “racista” en la sociedad del momento, en el cual se excluía a todo aquel proveniente de Tierra-2 después de una guerra que se originó cuando estos llegaron trayendo consigo a las hordas de Apokolips que los perseguían y arrasando con gran parte de la población y borrando del mapa a personajes como los Teen Titans se, se podrían diferenciar las tramas que se desarrollaban adicionalmente a la de nuestro visitante del futuro distante, pero nos interesa lo que ocurre al final con este, puesto que muere víctima del asesino Joker/Batman que fue enviado por Brother Eye para abortar la misión de joven encapotado. 

  

Tim Drake, quien se creía muerto y llevaba una vida tranquila como bartender, quien se vio enredado en estos eventos recibe el manto del murciélago del futuro y decide volver en el tiempo el momento en que ocurre la invasión para destruir a Brother Eye, pero al verse sobrepasado por este a nivel defensivo y ofensivo termina por optar a sus directrices básicas para que sea él mismo quien se destruya y no abra el portal que traería a los refugiados de Tierra 2 y la guerra consigo. Este hecho debía significar la desaparición de su línea de tiempo de 5 años a partir del presente, incluyendo su propia existencia, pero en un aparente acto de benevolencia, Brother Eye lo envía hacia algún punto del tiempo donde aparentemente todo está bien y el desastre fue evitado, pero no era más que una burla cruel, puesto que a donde llegó fue a un futuro donde Brother Eye de igual forma había atacado, lo que hacía parecer como si sus actos hubiesen sido en vano, pero no era así, puesto que en este futuro las consecuencias de su ataque fueron menos drásticas que en la línea de tiempo original, es decir, del futuro desde el cual Terry fue enviado al pasado. 

A partir de este punto se llevaron a cabo varias líneas argumentales en Neo Gotham y este nuevo mundo en el cual Tim era un completo extraño, un ser sin lugar el provenir de una línea de tiempo que no existía, un paria temporal, si lo queremos de ver de ese modo. En el proceso encontramos a viejos conocidos como Barbara Gordon, Matt McGinnis, hermano de Terry, enemigos como Inke, el Dr. Cuvier, Terminal y su banda de Jokerz, Rewire y Spellbinder. De igual modo, la introducción de personajes que nunca en la vida pensábamos volver a ver por pertenecer a obras ya en aparente olvido por parte de la editorial como Tuftan, el hombre tigre que se hizo amigo de Kamandi en la inconclusa “El Cuarto Mundo” del rey Jack Kirby, obra que le dio a DC conceptos muy importantes y personajes que a día de hoy son icónicos.

Durante el desarrollo de las aventuras de Tim Drake por este nuevo mundo (en el cual por cierto, su Tim Drake desapareció un buen día), se hace de un número importante de victorias; logra la derrota de Brother Eye, enfrentar el tema de los refugiados de estos yermos desiertos que acudían a Neo-Gotham en busca de ayuda, muy al estilo de lo ocurrido en Europa con los refugiados de Medio Oriente (salvando las distancias y matices), la restitución de la Justice League, la cual se creía perdida y finalmente la sorpresa de ver que Terry McGinnis había vuelto de la tierra de los muertos o mejor dicho, que este nunca había estado en ese barrio sino que desde el principio estuvo en la ciudad, pero sin recuerdos de quien era debido a la influencia y control mental por parte de Spellbinder y asumiendo la identidad de Rewire. 

 

El regreso del portador predilecto del manto del murciélago en el futuro derivaría en que el bueno de Tim abandonara dicho rol en beneficio de Terry, pero esto no se debe ver como una derrota para el ex-Robin detective, puesto que de entre todos los que usaron el manto del petirrojo, él particularmente nunca deseo ser Batman, sino que sentía un profundo amor por la identidad del joven justiciero, lo que a mi juicio siempre lo convirtió en el más capaz de los ayudantes de Bruce sin ser el más dotado físicamente ni a nivel de habilidades de lucha. El epílogo del número 16, que cierra la etapa N52 fue emotivo en una simple página, un Tim que nunca se encontró encajando en ese tiempo, se había convertido en el ser más solitario de la existencia, puesto que su hogar ya no existía, no tenía a donde volver o, mejor dicho; no tenía a CUANDO volver. ¿O sí? Esta es la pregunta que nos quedó a muchos luego de la viñeta final.

En este punto quiero hacer un poco de justicia al personaje. Tim Drake fue uno de los personajes peor tratados desde que ocurrió el New 52, el hecho de relegarlo solamente a estar en Teen Titans y de paso estando en manos de un escritor tan incapaz como Lobdell, quien nunca entendió su naturaleza, sino que lo convirtió en un personaje egocéntrico, pero con mucho dinero, dejando de lado la nobleza que siempre tuvo para con sus compañeros, la inteligencia que hizo que Batman  lo considerara el mejor detective del mundo para su edad y eso definitivamente fue desdibujar a un personaje tan carismático. Por suerte, en Batman Eternal, B&R Eternal y Detective Comics se le ha hecho algo de justicia y esperemos que sea así hasta que vuelva a tener una colección propia como aquella que ostentaba antes de Flashpoint y que resultaba muy entretenida, poniéndolo en su sitial correspondiente. Aunque algunas pistas apuntan a que vaya a desaparecer de las páginas de la editorial, esperemos que no. 

¿Qué pasó con Tim Drake tras el final? Pueden haber ocurrido unas cuantas cosas debido a lo ambiguo de la escena. Lo más evidente es que fue víctima de algún fenómeno temporal. ¿Pero a dónde fue? ¿A cuando fue? Eso con certeza no lo sabremos, pero podrían barajarse algunas alternativas. Bien podría haber sido extraído por parte de los Amos del Tiempo hacia el Vanishing Point por ser una anomalía temporal sin lugar en ninguna línea del flujo temporal, quizás reclutándolo para sus actividades; podría darse el hecho de que la energía temporal se haya alojado en él, lo cual lo haya hecho saltar hacia otra época, si esto es así podríamos tener a un Tim en plan de las series clásicas de ficción llegando a ciertos lugares a “arreglar” los hechos, recurso que podría aprovechar muy bien la editorial para corregir algunos desmadres de continuidad. Finalmente, la única opción que le podría dar un final feliz al personaje es que, si hacemos caso a la teoría de las cuerdas, su línea de tiempo no haya desaparecido, sino que se convirtió en una línea de tiempo alterna y aún exista en el hipertiempo como bien ha planteado Morrison infinidad de veces en sus obras. No es descabellado volver a ver a esas ver a eso personajes que nos dejaron con muchas incógnitas ¿Fifty Sue? ¿Madison Payne como Firestorm? ¿Stormguard?. Jurgens es muy bueno haciendo uso de las líneas de tiempo, así que quien sabe lo que le depare el futuro a Tim Drake, el Robin que nunca quiso ser Batman.

PARA LADRONCORPS

MANHUNTER.